Mis razones para votar el 26 de Septiembre, numero 8

Yo quería escribir algo que me parecía fantástico. Quería escribir sobre el proceso de aprendizaje que como sociedad, hemos tenido que hacer. Quería escribir algo que tuviera como esencia una búsqueda de redención, una búsqueda de perdón hacia los olvidados. Hacía aquellos que siempre vivieron en las penumbras, en la oscuridad, y que finalmente sintieron la oportunidad para estar tomados en cuenta. Quería también escribir algo que enorgullezería a todos los venezolanos que hemos tratado de entender al otro lado. A todos los venezolanos que buscaron entender una versión de la misma verdad, por ejemplo, el hecho que no sirve de nada tener a un Centro San Ignacio, si hay venezolanos en el olvido.

Quería que el escrito también nos ayudara a entender el desgaste inútil del odio. Quería escribir como los discursos de el señor Chavez, ya perdieron su utilidad. Quería demostrar como ya hemos aprendido a velar por todos los venezolanos, hasta el mas pobre, y en consecuencia no se necesita un defensor de los pobres; pues todos los venezolanos ya estamos dispuestos a asumir ese rol. Queria escribir esto, para sentir orgullo con nuestro aprendizaje, y poder observar estos 11 años no como un castigo, sino como una lección muy ruda, pero a sabiendas que lo facil no dura; solo lo dificil perdura.

Quería escribir algo con esa visión, pues me parece una manera excelente de dejar atras el odio, aquel odio maldito que nos divide y que causa que nos matemos. Quería tambien escribir unas lineas vagas acerca del odio, por ejemplo el hecho que todos podemos odiar, pero pocos podemos amar; que a veces el odio nos tienta con su facilidad y sus sueños de grandeza, pero que al final solo nos gana enemigos; y lo mas importante, que mientras el odio solo logra matar, el amor lo puede todo. Finalmente quería concluir con el hecho que el señor Chavez solo quiere que sigas odiando. Que sigas odiando a sus enemigos, pues igual que al diablo, te quiere tentar para que no crecieras y fueras mas grande que él. Y como remate final, queria describir mi inmutable Fé en nuestra capacidad para superar este odio, y crecer en un país de hermanos, mi Fé eterna en, como dijo el Doctor Rómulo Gallegos, "aquella raza buena, que sufre, ama y espera!"

Sin embargo, no escribí este texto. No lo escribí, porque algo indigno occurrío hoy. Hoy el 30 de Agosto del 2010, murío el Señor Franklin Brito. Murío por un paro cardíaco, sin embargo en realidad murío por su lucha contra la opresión. El inicio una huelga de hambre, reclamando sus derechos constitucionales, y llevo su gloriosa lucha hasta el final. Que en Paz descanse Bienaventurado sera su alma, pues el que tenga sed de justicia, siempre la encontrará. No escribí el texto, pues su muerte es una razón legitima para vacilar. Para vacilar entre el cuento hueco del amor, o aceptar la tentación y caer en el odio voraz.

Yo ya decidí.

Ahora descansa, señor Brito, y disfruta de tu sueño eterno...




PD: No quiero politizar la´pérdida de una vida humana, y asi robarla de su dignidad. Pido disculpas si he ofendido alguien con mis palabras.